Parece una bici más pero no lo es.

Efectivamente no es una bicicleta más ni mucho menos, este invento desarrollado por una compañía francesa ha llegado para todos aquellos que quieran mantenerse en forma montando en bicicleta pero de una forma diferente, si os fijáis lo primero que se echa en falta es el sillín, ¡No tiene! y todos os preguntaréis pero como es posible?
Ahí es donde radica la diferencia, de eso se trata, de ir de pie constantemente pedaleando y pudiendo alcanzar unas altas velocidades gracias a su gran plato, en general sus fabricantes dicen que las sensaciones son parecidas al surf, a los patines en línea o a ir en un gran patinete a toda leche. Fijaros bien en los pedales, son dos enormes bases para apoyar toda la planta del pié.
Pesa sólo 10 kilos y eso la hace el compañero ideal para moverte por la ciudad sin problemas, llevarla en el metro o donde te parezca.
Su precio ronda los 1250 euros y si queréis una no tenéis más que llamarnos.